Sunday, August 06, 2006

Israel, Bandera de Dios


ISRAEL: BANDERA DE DIOS PARA LAS NACIONES Y PARA LA IGLESIA


Asimismo acontecerá en aquel tiempo, que Jehová alzará otra vez su mano para recobrar el remanente de su pueblo que aún quede en Asiria, Egipto, Patros, Etiopía, Elam, Sinar y Hamat, y en las costas del mar, y levantará pendón a las naciones y juntará los desterrados de Israel, y reunirá los esparcidos de Judá de los cuatro confines de la tierra. (Isaías 11:11-12).
Dios siempre usa Israel como una bandera. De acuerdo al diccionario, una bandera es “una tela colgada de un palo o poste, usada como estandarte o pabellón de un emperador, rey; bandera de un país etc... Cualquier cosa que se usa como símbolo de principios”. Una bandera es algo que se ve, algo que supuestamente atrae la atención y que comunica un mensaje específico: esto es lo que Israel es, real y concretamente, entre las naciones. David Dolan, un periodista creyente en Cristo y residente en Israel, explica que la palabra traducida como “insignia”, “estandarte” o “bandera” es la palabra hebrea “ness”, que significa literalmente “milagro” o “señal”. Un milagro es una señal, un signo o una firma – una bandera proclamando la existencia y el poder del Dios Todopoderoso (Dolan 1995).

Israel siempre ha sido bandera de Dios – revelando sus juicios y misericordias. En las Escrituras, vemos los juicios de Dios sobre Israel cuando la nación se apartó de sus mandamientos. También vemos la misericordia de Dios en que perdonó a Israel, siempre que clamaron a él buscando su perdón. En muchos pasajes de las Escrituras, Dios habla de los demás pueblos en el sentido de que están viendo la forma en que él trata con la nación judía. En cierto lugar, por ejemplo, habla de sí mismo siendo santificado en Israel a la vista de muchas naciones (Ezequiel 39:27). Por otra parte, el salmista cantaba, Jehová ha hecho notoria su salvación; a vista de las naciones ha descubierto su justicia. Se ha acordado de su misericordia y de su verdad para con la casa de Israel; todos los términos de la tierra han visto la salvación de nuestro Dios. (Salmo 98:2-3).

En el presente, Israel revela la actividad de Dios al traer de vuelta a su antigua tierra natal (o a la tierra de sus antepasados), a un pueblo dispersado por todo el mundo durante más de mil ochocientos años. Han regresado a Israel de más de noventa y dos países distintos, en contra de toda probabilidad, a la misma tierra en la cual se había formado originalmente su nación.

La existencia del pueblo judío hoy en día es un milagro extraordinario. Consideremos los siguientes hechos: Estuvieron fuera de su tierra durante más de 2.500 años de sus 4.000 años de historia. Sobrevivieron a seis civilizaciones que se derrumbaron alrededor de ellos. Han tenido un impacto sobre el mundo que está fuera de toda proporción con el tamaño de su población. Han hecho contribuciones inmensas a la religión, la ciencia, la música y la literatura. Han sobrevivido a intensos prejuicios y decididos intentos de exterminio.

La mayor parte de los pueblos que vivieron en tiempos antiguos ya no existen hoy – ceneos, cenezeos, cadmoneos, heteos, ferezeos, refaitas, amorreos, cananeos, girgaseos, jebuseos, filisteos, amonitas y moabitas, entre otros. No obstante, los judíos están con nosotros en el presente como una nación distinta, viviendo en la tierra de sus antepasados y hablando la lengua de sus ascendientes. Dios ha resguardado este pueblo antiguo para su propósito especial – fueron destinados para comunicar su verdad a las naciones y a la iglesia.

PROFECÍAS CUMPLIDAS


El hecho de que Israel es una bandera para las naciones y para la iglesia está claramente demostrado por muchas profecías en la Escritura que se refieren a la nación judía, las cuales han sido cumplidas precisamente como Dios dijo que sucedería. Aun el ateo, que honestamente examina esas profecías junto a los hechos históricos, sólo tiene una opción -- ¡admitir que las profecías eran exactas! Y mediante este cumplimiento exacto, Dios quiere que el hombre sepa que él existe y que está a cargo del universo entero. A continuación viene un resumen de unas pocas profecías sobre Israel que han sido cumplidas en nuestros días – justo ante nuestros ojos.

RETORNO A LA TIERRA

El Señor dijo que Israel sería esparcido entre las naciones como un castigo por sus pecados, pero que más tarde sería recogido de nuevo a su tierra (Jeremías 23:7-8, Isaías 11:11-14). Dios no sólo dijo que los judíos volverían a su tierra, señaló además los medios por los cuales viajarían; esto es, por tierra, mar y aire (Isaías 60:4-9), y que los gentiles ayudarían a los judíos en su viaje de vuelta a su tierra (Isaías 60:10). En nuestros días, hemos testificado el retorno del pueblo judío a Israel desde cada continente del mundo. En esto la Palabra del Señor ha sido cumplida, tal como había dicho: No temas, porque yo estoy contigo; del oriente traeré tu generación, y del occidente te recogeré. Diré al norte: da acá; y al sur: no detengas; trae de lejos mis hijos, y mis hijas de los confines de la tierra. (Isaías 43:5-6). Los judíos realmente han vuelto a Israel desde el este (Asia), desde el oeste (Europa Occidental y los Estados Unidos de América), desde el norte (Antigua Unión Soviética) y desde el sur (Etiopía, África del Sur, Australia y Nueva Zelanda). Recordemos que cuando Dios da estas direcciones usa la Tierra Prometida como punto de referencia.


UN ESTADO UNIFICADO

Después de la muerte del rey Salomón Israel fue dividido en dos reinos, es decir, el reino del norte, que comprendía diez tribus, llamado “Israel”, y el reino del sur formado por dos tribus (Judá y Benjamín), llamado “Judá” (1º Reyes 12). El reino del norte fue llevado cautivo en el año 722 AC como resultado de la invasión de Asiria, mientras que el reino del sur fue destruido y su gente exiliada por los babilonios en el año 586 AC. Sin embargo, Dios predijo que en los últimos días Israel no solamente retornaría a su tierra como una entidad política independiente, sino que sería un estado unificado: Y les dirás: Así ha dicho Jehová el Señor: He aquí, yo tomo a los hijos de Israel de entre las naciones a las cuales fueron, y los recogeré de todas partes, y los traeré a su tierra; y los haré una nación en la tierra, en los montes de Israel, y un rey será a todos ellos por rey; y nunca más serán dos naciones, ni nunca más serán divididos en dos reinos. (Ezequiel 37:21-22, ver también Isaías 1:13). En el presente podemos ver un único estado judío de norte a sur, tal cual el Señor lo había profetizado.

REGRESO A JERUSALÉN

Durante más de diecinueve siglos, los judíos no han tenido control sobre Jerusalén. Fueron expulsados de Jerusalén en el año 70 DC, y de nuevo en el año 135 DC, por los ejércitos romanos. Cuando se hizo realidad su condición de estado en 1948, Israel todavía no tenía el control sobre la ciudad vieja de Jerusalén, ya que las Naciones Unidas habían declarado a Jerusalén como ciudad internacional. No obstante, en 1967, a causa de una guerra de agresión contra Israel, el estado judío recuperó la vieja ciudad de Jerusalén del Reino Hachemita de Jordania. Estos hechos respecto del pueblo judío y de Jerusalén fueron un cumplimiento de la profecía de Cristo: Y caerán a filo de espada, y serán llevados cautivos a todas las naciones; y Jerusalén será hollada por los gentiles, hasta que los tiempos de los gentiles se cumplan. (Lucas 21:24). Precisamente, hemos sido informados que cuando Israel reconquistó la ciudad de Jerusalén, el 7 de junio de 1967, un creyente en Cristo envió un telegrama apropiado a sus amigos, un mensaje con las siguientes palabras: “Los tiempos de los gentiles se han cumplido”.

RESTAURACIÓN DEL MEDIO AMBIENTE DE ISRAEL

Durante los muchos siglos que Israel vivió en el exilio, desde el año 70 DC hasta nuestros días, la Tierra Prometida sufrió la negligencia y el maltrato de aquellos que la ocuparon. Hasta pasado el siglo diecinueve, esa tierra estaba hecha un desierto en algunos lugares, y en otros estaba cubierta de ciénagas con malaria. Pero la Palabra del Señor, a través de los profetas, se ha realizado: Israel ha recuperado su tierra con tecnología avanzada, hasta el punto de poder identificarse con la profecía: Días vendrán cuando Jacob echará raíces, florecerá y echará renuevos Israel, y la faz del mundo llenará de fruto. (Isaías 27:6). ¡Ciertamente Israel ahora es uno de los países que está a la cabeza en la exportación de frutas tropicales y mediterráneas!

RECONSTRUCCIÓN DE LOS ASENTAMIENTOS HISTÓRICOS

Hablando del final de los tiempos, el Señor había dicho con respecto a los judíos: Reedificarán las ruinas antiguas, y levantarán los asolamientos primeros, y restaurarán las ciudades arruinadas, los escombros de muchas generaciones. (Isaías 61:4). Esto no puede referirse al retorno de los setenta años de exilio babilónico, porque setenta años no son “muchas generaciones”. Sin embargo, en nuestros días, los judíos después de muchas generaciones de exilio, han vuelto a Israel y han reconstruido muchos poblados antiguos.

AYUDA DE LOS GENTILES PARA LA RESTAURACIÓN

El Señor había dicho por el profeta Isaías: Y extranjeros apacentarán vuestras ovejas, y los extraños serán vuestros labradores y vuestros viñadores. (Isaías 61:5). Cuando Israel regresó a la tierra, después de los setenta años de cautiverio babilónico, se pusieron de acuerdo para expulsar a las mujeres extranjeras y rehusaron la ayuda de los samaritanos en la reconstrucción del templo. Sin embargo, en este tiempo, ¡Israel ha aceptado los servicios voluntarios de muchos jóvenes gentiles, quienes han cuidado los rebaños de Israel y atendido los viñedos en los “Kibbutzim”, las granjas colectivas de Israel!

RECUPERACIÓN DE LA LENGUA HEBREA

Durante más de diecisiete siglos de exilio judío, la lengua hebrea parecía estar en peligro de extinción. Esto fue debido a que los judíos tenían que aprender las lenguas de sus tierras de exilio, para ser capaces de comunicarse con sus hospederos y desviarse algo de la persecución que enfrentaban. No obstante, Dios se aseguró de que esta lengua no llegara a extinguirse. En donde los judíos tenían cierto grado de libertad, usaban el hebreo en las escuelas judías y en la sinagoga. A pesar de esta medida, en las generaciones consecutivas muchos judíos en la dispersión perdieron su conocimiento del hebreo. Sin embargo, en el presente Dios ha hecho que el idioma hebreo sea, una vez más, la lengua vibrante del moderno Estado de Israel. A su llegada a Israel, a los inmigrantes judíos se les provee de clases de hebreo (“Ulpanim”), que les introducen, no solamente a la lengua, sino también al ambiente cultural de Israel. A través de las “Ulpanim”, los inmigrantes son capaces de comunicarse unos con otros, no importa de que tierra de exilio procedan. En esto se ha cumplido la Palabra de Dios: En aquel tiempo devolveré yo a los pueblos pureza de labios, para que todos invoquen el nombre de Jehová, para que le sirvan de común consentimiento. (Sofonias3:9).

BANDERA PARA LA IGLESIA


Israel no es solamente una bandera o señal para las naciones, es también una bandera para la iglesia. A continuación mostramos dos maneras por las cuales es una señal para la iglesia.

MENSAJERO O PORTAVOZ DE LA SEGUNDA VENIDA

Primero, mirando a Israel, la iglesia sabe que Cristo viene pronto. El Señor Jesús dijo a sus discípulos:
Mirad la higuera y todos los árboles. Cuando ya brotan, viéndolo, sabéis por vosotros mismos que el verano está ya cerca. Así también vosotros, cuando veáis que suceden estas cosas, sabed que está cerca el reino de Dios. De cierto os digo, que no pasará esta generación hasta que todo esto acontezca. El cielo y la tierra pasarán, pero mis palabras no pasarán. (Lucas 21:29-33).

La higuera es usada en las Escrituras para referirse a Israel. A la higuera le brotaron hojas en 1948, con el nacimiento del moderno Estado Judío, después de casi dos mil años de exilio. Al final de la década de los años 50 y principio de los 60, a muchas naciones en el tercer mundo (“otros árboles”) también les brotaron hojas cuando alcanzaron su independencia política. En otras palabras, estas naciones adquirieron su identidad. Generalmente las hojas le ayudan al observador a identificar las clases particulares de árboles.

Por ejemplo, a lo largo de los siglos pasados siempre ha habido guerras y rumores de guerras, terremotos, hambres, plagas y más. No obstante, nosotros somos la única generación de los últimos mil novecientos años que ha visto surgir un estado judío soberano y que ha sido preservado, pasando por seis guerras, por más de cuarenta y cinco años. El Estado de Israel fue revivido el 14 de mayo de 1948, y Jerusalén fue devuelta a Israel el 7 de junio de l967. Estos acontecimientos preparan el escenario para el cumplimiento de las profecías de los últimos tiempos, muchas de las cuales presuponen que Israel estará de regreso en su tierra para el tiempo de su cumplimiento. Por tanto, el Señor está diciendo a la iglesia, por medio de Israel: “Prepárate, tu Novio viene pronto”.

En las Escrituras, el restablecimiento de Israel está claramente vinculado a la segunda venida de Cristo:

Porque el Señor reconstruirá Sion, y aparecerá en su gloria. (Salmo 102:16, ver también Isaías 24:21-23).



EVIDENCIA DE LA FIDELIDAD DE DIOS

En segundo lugar, Israel es una bandera para la iglesia al mostrar que Dios es absolutamente fiel a su Palabra. Él cumple todos los pactos que hace. Ha cumplido todos los pactos con la simiente de Abraham, y será fiel a todas las promesas que ha hecho con cada verdadero creyente. Así como Dios estará cuidando de Israel en todos los desafíos que le quedan por delante, también cuidará a la verdadera iglesia en los tiempos que se avecinan.

NEGLIGENCIA ONEROSA

A la luz de lo que hemos hablado, todo creyente que no esté enterado de los tratos de Dios con Israel, carece de una apreciación esencial y concreta de la fidelidad de Dios. Con respecto a las operaciones de Dios con Israel en el desierto a su salida de Egipto, Pablo escribe a la iglesia de Corinto:
Y estas cosas les acontecieron como ejemplo, y están escritas para amonestarnos a nosotros, a quienes han alcanzado los fines de los siglos. (1ª Corintios 10:11).

Es muy triste decirlo, pero a pesar de esto, Israel no es un asunto de interés primordial para muchos de los creyentes gentiles. Están ocupados con varios aspectos del ministerio, ¡sin tener ni idea de cómo Dios está usando a Israel para cumplir sus propósitos para los tiempos finales! ¡Muchos evangélicos creen sinceramente que por medio de su fe han sustituido a Israel en los planes de Dios! Esto es lo que se conoce como la “Teología del Reemplazo”. Tal enseñanza está en contradicción total con las Escrituras. Dios hizo un pacto eterno con Abraham, Isaac y Jacob (Salmo 105:8-15). Por tanto, la advertencia de David Dolan a los creyentes gentiles es apropiada aquí. En una conferencia anual del grupo “Amigos Cristianos de Israel”, en la fiesta de Shavuot (Pentecostés) en Jerusalén, Dolan dijo:

... Vemos que los temas de la reunión de Israel y el status final de Jerusalén, son mucho más que meros asuntos políticos, en los que podemos concentrarnos o ignorarlos totalmente si lo deseamos. De hecho, son temas recurrentes en la Biblia, indicando su gran importancia para el máximo Autor de la misma, Dios. ¿Cómo podemos nosotros, los que profesamos fe en el Dios de la Biblia, ser indiferentes, o aún peor, opuestos al profetizado segundo retorno del pueblo judío a estas colinas, valles, ciudades, pueblos? ¿Cómo podemos ponernos en contra de la restauración, por parte de Dios, en nuestro siglo, de la tierra patria de los judíos, aún si somos árabes o trabajamos con árabes o musulmanes? ¿Cómo podemos sostener que la promesa de Dios, a través de Isaías, de juntar a los desterrados de Israel una segunda y última vez, y de juntar a los dispersos de Judá desde las cuatro esquinas de la tierra, se aplica mayormente a la iglesia gentil? ¿Cómo nos atrevemos a negarle al Creador del universo el derecho a permanecer fiel a su antiguo pueblo del pacto – al prometerles una tierra en particular, con una ciudad capital particular, y luego hacerles volver a ella después de casi dos mil años de andar errantes por el mundo? ¿Qué podemos hacer sino regocijarnos de que nuestro Dios es imponente y cumplidor de sus acuerdos, un Dios que permanece fiel a todo su pueblo...? (Dolan, 1995).

fuente: http://www.antesdelfin.com

1 Comments:

Blogger Cristianos por Israel said...

Estimado hermano David Xavier:
Muy buen informe!

¿Nos permites colocar en nuestro blog "Cristianos por Israel" un fragmento del inicio del post para que los visitantes puedan, si desean, seguir con la lectura linkeando a este sitio?

De todas manera, ¡Muchísimas Gracias por compartir tan completo informe!

Un saludo fraterno
Daniel Dañeiluk
elojoprotestante@gmail.com

11:04 AM  

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