Encomienda a Jehová tu camino, y confía en él; y él hará.
Salmo 37.5
Dios está comprometido a suplir nuestras necesidades. Pablo nos dice que el hombre que no provee para los suyos es peor que un incrédulo ( 1 Timoteo 5.8 ) ¿Cuánto más un Dios santo cuidará de sus hijos? Después de todo, ¿cómo podemos cumplir su misión si no son cubiertas nuestras necesidades?¿Cómo podemos enseñar, ministrar o influir si no se satisfacen nuestras necesidades básicas? ¿Nos reclutará Dios en su ejército y no proveerá una intendencia? Por supuesto que no.
«[Ruego que] el Dios de paz les dé todo lo necesario para que ustedes puedan hacer lo que él desea». ( Hebreos 13.20 ) ¿No ha recibido esta oración respuesta en nuestra vida? Quizás no hayamos tenido un festín, pero ¿no hemos tenido siempre alimento? Quizás no haya habido banquete, pero por lo menos hubo pan. Y muchas veces hubo banquete.
0 Comments:
Post a Comment
<< Home